Decidir cómo ejecutar una estrategia de trading cuantitativo

Nota del editor: Nos complace ofrecer un extracto del libro Guía de iniciación al trading cuantitativo escrito por Martí Castany Aparicio y publicado por Libros de Cabecera.
En esencia, todos los modelos están equivocados, pero algunos son útiles. —George E.P. Box
Cuando se definen los modelos teóricos de las estrategias basadas en un análisis cuantitativo de los datos, es necesario también decidir de qué manera van a ejecutarse en el mercado. A la hora de realizar esta tarea, solo puede hacerse de tres maneras distintas: mediante estrategias manuales, estrategias semiautomáticas o estrategias totalmente automáticas. A continuación analizaré cada una de las tres opciones y te contaré cuál es, para mi, la mejor opción.
Ejecución manual
Empezaré por las estrategias manuales. Estas son las estrategias en las que es el trader quien identifica la señal de entrada al mercado y ejecuta la orden, siguiendo un algoritmo de ejecución. La identificación de las señales y la ejecución de las órdenes seguirá siendo sistemática y, teóricamente, libre de cualquier subjetividad. Y digo teóricamente porque, para un ser humano, es muy complicado comportarse como una máquina y suprimir su parte emocional. Hay varios factores que pueden influir negativamente en la operativa totalmente manual. Al trabajar con probabilidades basadas en un análisis previo, hay que entrar en todos los trades (las operaciones) que el sistema recomiende al nivel de riesgo que previamente le hemos estipulado; pero esto es mucho más fácil decirlo que hacerlo. Créeme, lo he vivido en mis propias carnes y lo he visto en muchos compañeros. Te pongo dos ejemplos: primero, en el caso de que lleves una racha ganadora, sentirás euforia y lo único que vas a querer es ejecutar el siguiente trade lo antes posible. Esto puede llevar a dos problemas; inventarte una señal con la excusa de entrar, o aumentar la exposición del próximo trade. Ambos comportamientos anulan la ventaja estadística que tiene tu sistema, restando beneficios a medio y largo plazo, mientras aumenta sustancialmente el riesgo.
En un segundo ejemplo, imagínate que estás en plena racha perdedora, algo que psicológicamente es muy duro, porque ganar es fácil, pero perder no lo es en absoluto. Tu sistema te da otra señal para entrar y decides ignorarla por miedo. Te quedas petrificado y buscas mil excusas, todas irracionales, para justificar la decisión de saltarte tus propias normas. ¿Y si resulta que esa entrada era ganadora, limpiando todas las pérdidas anteriores? Ambos ejemplos son fruto de lo que se conoce como heurística de pensamiento. Tu cerebro da más peso a los últimos acontecimientos y toma decisiones rápidas teniendo solamente eso en cuenta y olvidándose del contexto global. Es un mecanismo biológico para ahorrar energía, y es automático. Solamente podrás darte cuenta de cuando ocurre esto, y minimizar sus efectos, analizando tu propio pensamiento y comportamiento.
La fatiga es otro componente importante que se presenta en el trading totalmente manual. La necesidad de permanecer delante de la pantalla para detectar las señales e introducir las órdenes te obliga a tener un horario de operativa limitado, lo que puede traducirse, según qué estrategias estés usando, en la pérdida de oportunidades. También puede ser que tu estrategia sea rentable en los horarios de poca volatilidad (como el horario asiático en el forex) y debas operarla durante ese horario. El problema será que si vives en América o en Europa, ese horario coincide con la noche y la madrugada.
Otro problema ocurre cuando sobreestimas tus capacidades. Al principio te dices que podrás aguantar 8 horas delante de la pantalla, pero cuando lleves 3, tu cerebro estará tan cansado que no verás las señales o responderás mal a ellas a causa de la fatiga. Y además, ¿quién querría estar 8 horas delante de la pantalla? Eso significaría ser esclavo de tu trabajo y eliminar tu tiempo libre, y dudo que te plantees entrar en este negocio para seguir intercambiando tu tiempo por dinero, como harías en cualquier otro trabajo más común.
Para mí, y esta es mi opinión personal, no existe ninguna ventaja para siquiera plantearse operar de forma totalmente manual estrategias basadas en un análisis cuantitativo, a no ser que te guste y realmente disfrutes siendo tú quien detecta las señales e introduce las órdenes.
Ejecución semiautomática
Las estrategias semiautomáticas son aquellas en las que existe una combinación entre el operador y la máquina a la hora de leer las señales o de introducir las órdenes. En este caso la automatización puede estar en la detección de la señal de entrada (y el trader introduce manualmente las órdenes) o en la ejecución propia de las órdenes, siendo el trader quien identifica la señal. El trading semiautomático es una muy buena manera de ejecutar una estrategia ya que elimina muchas de las desventajas de la operativa manual. Cuando se automatiza la detección de las señales se elimina la necesidad de estar delante de la pantalla para poder localizarlas. Cuando se da una señal, el trader puede recibir una alerta en su dispositivo móvil si no está en la oficina, o el ordenador puede hacer sonar una alarma por los altavoces para avisar al trader que se ha dado una ventana de oportunidad. Esto es válido para estrategias de baja frecuencia y ventanas de oportunidad largas, ya que no habrá muchas señales por día y el tiempo que pase entre que suene la alarma y se introduzca la orden no afectará a los resultados. Como te imaginarás, si para que la estrategia funcione correctamente es necesario introducir la orden durante los 50 milisegundos posteriores a la señal, esta estrategia será inviable para que cualquier mortal la implemente de manera semiautomática. También es muy buena opción cuando las señales se dan, por ejemplo, al cierre del día. El trader deja todas las operaciones pendientes en el mercado para que se ejecuten automáticamente a primera hora del día siguiente.
Por el otro lado, cuando la parte automatizada es la propia ejecución de las órdenes y es el trader quién detecta las señales, podría volver a aparecer la necesidad de permanecer atento a la pantalla para la detección de las señales, sobre todo si operas en temporalidades bajas. Sin embargo, no tiene por qué ser así. Podrías tener identificado y estudiado el comportamiento que quieres explotar y, cuando lo detectes, lo marcarías en el gráfico. Después el sistema identificaría automáticamente dicha marca en el gráfico y, si se cumplieran las condiciones detalladas en tu estrategia, ejecutaría la orden correspondiente. De esta manera, una vez detectado el comportamiento no sería necesario que estuvieras monitorizando el precio constantemente, ya que sería la máquina quien se ocuparía de ello. En este caso, y al igual que ocurre con el trading totalmente manual, el tiempo de exposición a la pantalla estará también relacionado con la temporalidad en la que trabajes. Si usas, por ejemplo, un gráfico de velas japonesas con un marco temporal de 5 minutos, estarás obligado a revisar el precio constantemente, mientras que si utilizas velas de 4 horas, solamente te hará falta consultar el gráfico 3 o 4 veces al día (teniendo en cuenta que duermas 8 horas).
Su principal inconveniente es que aún existirá una parte de la toma de decisiones que será humana y, por ende, estará sujeta a la psicología del trader. Aunque el sistema dará automáticamente la señal de entrada, el trader podría saltarse las normas y no ejecutar la orden correspondiente, tal y como te he explicado en el apartado del trading manual.
Ejecución automática
Por último, la operativa automatizada es aquella en la que tanto la identificación de las señales de entrada como la propia ejecución y gestión de las órdenes se hacen de manera completamente autónoma, sin necesidad de intervención por parte del trader. Las ventajas de la automatización completa son evidentes. No será necesario estar delante de la pantalla para poder ejecutar tu estrategia, eliminando los errores humanos a la hora de entrar operaciones nuevas y brindándote mucho tiempo libre. Una vez la estrategia está funcionando, no necesitarás hacer nada más. En efecto, cuando mejor funciona un sistema automático es cuando el trader no interviene durante su ejecución.
Para mí, la ventaja más importante es la realización automática de un backtest. Cuando este lo realiza un algoritmo computerizado, te asegura que los resultados son 100% objetivos y sin ningún sesgo psicológico. Recuerda lo que comenté en el punto de la toma de datos del capítulo 1, cuando hablaba del método científico. Te garantizo que realizar un backtest manual es de las tareas más tediosas y monótonas que he realizado, lo que a su vez causa fatiga mental, que provoca errores a la hora de recoger los datos, y su fiabilidad se ve comprometida.
Las desventajas del trading totalmente automático son que necesitarás una infraestructura un poco más compleja para la ejecución, a la vez que necesitarás más potencia de cálculo para poder realizar tanto los backtest como las optimizaciones en periodos razonables de tiempo.
Esta es la técnica que yo utilizo y en la que me voy a centrar a partir de ahora. De todos modos, verás que la mayoría de los conceptos que aprenderás son también extrapolables a las estrategias semiautomáticas.